Las medidas migratorias más estrictas en EE. UU. podrían limitar el voto exterior hondureño y frenar la participación electoral.
Estados Unidos.- El futuro del voto exterior hondureño en las elecciones generales del 30 de noviembre de 2025 es incierto, especialmente para los ciudadanos que residen en Estados Unidos. Las políticas migratorias impulsadas por Donald Trump, en caso de un eventual regreso a la presidencia, podrían endurecer aún más las condiciones para los migrantes, generando temor e incertidumbre entre quienes desean participar en el proceso democrático.
En las elecciones de 2021, apenas 375 hondureños lograron votar desde el extranjero, una cifra muy baja considerando los miles de connacionales que residen fuera del país. Para 2025, el Consejo Nacional Electoral (CNE) ha anunciado la apertura de 15 centros de votación en Estados Unidos, aunque en un inicio se contemplaron 18. No se instalarán urnas en países como España, donde también reside una comunidad significativa de hondureños.
Sin embargo, el panorama es aún más complicado por la falta de avances concretos: el reglamento del voto exterior todavía no ha sido aprobado y miles de ciudadanos en el extranjero siguen sin recibir su Documento Nacional de Identificación (DNI). Según cifras citadas por El Heraldo, al menos 350,000 DNI estarían retenidos, lo que podría dejar sin voz a una parte considerable del electorado.
Autoridades del CNE reconocen los desafíos logísticos y políticos. Cossette López, consejera del organismo, ha advertido que solo algunos centros podrían estar en funcionamiento debido a las condiciones migratorias adversas. Por su parte, la presidenta del CNE, Ana Paola Hall, reconoció que aún no se han definido reglas claras para el voto exterior, lo que profundiza la preocupación entre los hondureños que residen fuera del país.
A medida que se acerca la fecha de las elecciones, aumentan las presiones para que el Estado garantice un proceso electoral inclusivo y transparente. Organismos internacionales y actores políticos han señalado que la falta de participación del voto exterior podría afectar la legitimidad del proceso electoral.
