La administración de Donald Trump inició una reestructuración de altos mandos en ICE, reemplazando directores regionales con funcionarios de la Patrulla Fronteriza (CBP) para endurecer las políticas migratorias y aumentar las deportaciones.

WASHINGTON, D.C. — La administración de Donald Trump ha lanzado una reestructuración interna del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), reemplazando a varios líderes regionales con funcionarios de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), en un esfuerzo por acelerar las deportaciones y reforzar la aplicación de leyes migratorias.
De acuerdo con reportes de NBC News y Fox News, la medida responde al interés de la Casa Blanca por adoptar tácticas más agresivas similares a las utilizadas por la CBP en operaciones recientes.
ICE bajo presión para aumentar deportaciones
Fuentes del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) aseguraron que el presidente Trump y sus asesores están “impacientes con la lentitud de ICE” y buscan implementar un enfoque más directo.
Los reportes indican que directores de oficinas de campo en al menos ocho grandes ciudades, entre ellas Los Ángeles, Filadelfia, Phoenix y Nueva Orleans, están siendo reemplazados.
Un funcionario del DHS explicó que la Casa Blanca percibe a la CBP como “más efectiva y dispuesta a actuar sin dilación”. En palabras de un oficial:
“La mentalidad es que CBP hace lo que se le ordena, mientras ICE no está cumpliendo con los resultados esperados.”
Operaciones más agresivas y nuevas figuras de liderazgo
Los cambios en la estructura de ICE están siendo coordinados por Corey Lewandowski, colaborador cercano de la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem. Según Fox News, la reorganización ya está en marcha.
Entre las razones para la sustitución se encuentran las operaciones de alta intensidad ejecutadas por la CBP, como el uso de helicópteros Black Hawk y vehículos no identificados para realizar redadas urbanas.
Un agente de la Patrulla Fronteriza citado por el medio defendió el enfoque:
“Cuando hablamos de deportaciones masivas, no se trata solo de los casos más graves. Cualquiera que esté ilegalmente en el país puede ser deportado.”
Tensiones dentro del Departamento de Seguridad Nacional
El movimiento ha generado fricciones internas en el DHS, donde algunos funcionarios advierten que la nueva estrategia podría tensar aún más las relaciones entre ICE y la CBP, dos agencias con enfoques distintos sobre la aplicación de las leyes migratorias.




