El Servicio Interno de Impuestos (IRS) anunció la suspensión temporal del 46% de su personal debido al cierre gubernamental en curso, que ya entra en su segunda semana sin acuerdo político.

El Servicio Interno de Impuestos (IRS) de Estados Unidos anunció que suspenderá temporalmente a casi la mitad de su fuerza laboral, como parte del cierre parcial del gobierno federal que continúa sin una solución a la vista.
Según el plan de contingencia publicado en el sitio web de la agencia, solo el 53.6% de los empleados —alrededor de 39,870 personas— permanecerán activos, mientras que el resto será puesto en licencia sin goce de sueldo hasta nuevo aviso.
La medida forma parte de los recortes operativos que afectan a múltiples agencias federales, luego de que el presidente Donald Trump y el Congreso no alcanzaran un acuerdo presupuestario para financiar las operaciones gubernamentales.
La mayoría de las operaciones del IRS están detenidas
En una carta enviada a su personal, el IRS confirmó que la mayoría de sus operaciones están cerradas, incluyendo atención telefónica, asistencia en persona y procesamiento de algunas devoluciones o solicitudes.
El primer plan de contingencia de la agencia cubría los cinco primeros días hábiles del cierre, periodo en el que el IRS pudo continuar funcionando gracias a los fondos remanentes de la Ley de Reducción de la Inflación impulsada por los demócratas.
Sin embargo, esos recursos ya se han agotado, obligando a una reducción drástica de personal y servicios.
Un impacto acumulado en el personal y en los contribuyentes
El cierre ocurre tras un año en que el IRS ya había ejecutado despidos masivos bajo la supervisión del Departamento de Eficiencia Gubernamental, lo que redujo su plantilla de 100,000 empleados a unos 75,000.
La nueva suspensión afectará a aproximadamente 35,000 trabajadores adicionales, lo que podría retrasar servicios esenciales como el procesamiento de declaraciones de impuestos y devoluciones.
El presidente Trump había anticipado que alrededor de 750,000 empleados federales serían suspendidos temporalmente en diversas agencias, como parte de las medidas de ahorro derivadas del estancamiento presupuestario.
Un cierre sin fin a la vista
El cierre gubernamental ya ha entrado en su segunda semana, sin señales de un acuerdo entre la Casa Blanca y el Congreso.
Los analistas advierten que, de prolongarse, la suspensión del IRS podría afectar la recaudación fiscal y los preparativos para la próxima temporada de impuestos, prevista para inicios de 2026.




