Un agente del Departamento de Seguridad Nacional ofreció dinero y protección al piloto del presidente venezolano a cambio de traicionarlo.

Estados Unidos intentó reclutar al piloto principal del presidente venezolano Nicolás Maduro para que desviara un vuelo oficial y facilitara su captura. De acuerdo con una investigación de Associated Press, la operación fue impulsada por Edwin López, agente del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) asignado a la embajada estadounidense en República Dominicana.
López estableció contacto con el piloto, identificado como Bitner Villegas, cuando dos aviones del gobierno venezolano fueron enviados a reparación en Santo Domingo. Durante ese encuentro, el agente le propuso colaborar con Washington: le ofreció protección, asilo político y una recompensa económica si aceptaba entregar al mandatario desviando su avión hacia un territorio controlado por Estados Unidos o alguno de sus aliados.
Aunque el piloto no accedió al plan, mantuvo una comunicación cifrada con el agente durante más de un año, lo que evidenció el seguimiento persistente del caso por parte de las autoridades estadounidenses. El operativo se manejó con absoluto hermetismo y nunca llegó a ejecutarse, pero reveló el nivel de riesgo que Washington estaba dispuesto a asumir para intentar detener a Maduro, acusado en EE. UU. de narcotráfico y terrorismo vinculado al tráfico de drogas.
Hasta el momento, ni el gobierno venezolano ni el Departamento de Seguridad Nacional han comentado sobre el caso. Expertos en política internacional consideran que el intento refleja el escalamiento de las estrategias encubiertas de EE. UU. contra el régimen venezolano, así como el deterioro de las relaciones bilaterales entre ambos países.
La operación, aunque fallida, deja abierta la interrogante sobre qué nuevas tácticas podría emplear Washington en su intento por llevar a Maduro ante la justicia estadounidense.




