José Adolfo Macías,‘Fito’, líder de Los Choneros, fue extraditado a EE.UU. tras ser acusado de traficar miles de libras de cocaína y liderar una violenta red criminal.
El Gobierno de Ecuador extraditó este domingo, 20 de Julio, a José Adolfo Macías Villamar, conocido como ‘Fito’, uno de los narcotraficantes más peligrosos del país, quien enfrenta cargos en Estados Unidos por la importación de grandes cantidades de cocaína. La medida se concreta semanas después de su recaptura, tras haberse fugado de prisión a inicios de 2024.
José Adolfo Macías Villamar es identificado como el máximo líder de Los Choneros, una organización criminal ecuatoriana con vínculos internacionales. Según investigaciones, su red empleaba sicarios, sobornaba a funcionarios y tenía acceso a armamento militar para operar en el tráfico de drogas, principalmente cocaína.
Macías fue arrestado por primera vez en 2011, pero logró consolidar su poder delictivo desde el interior de distintas cárceles del país. Su última fuga, a comienzos del año, provocó una fuerte crisis de seguridad que obligó al Gobierno a declarar estado de excepción.
En abril de 2025, una corte federal en Nueva York presentó cargos formales contra ‘Fito’ por liderar una operación de tráfico de drogas que habría introducido miles de libras de cocaína al mercado estadounidense. Las autoridades norteamericanas sostienen que Los Choneros actuaban como un eslabón clave entre los productores sudamericanos y los carteles que operan en EE.UU.
La extradición fue solicitada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos y ejecutada por las autoridades ecuatorianas bajo un fuerte operativo de seguridad. Según el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad (SNAI), el traslado se realizó desde el Centro de Detención La Roca, en Guayaquil.
La extradición de ‘Fito’ es vista como una acción simbólica y estratégica en el combate al narcotráfico, especialmente en un momento de creciente violencia en Ecuador. Los expertos advierten, sin embargo, que la captura de líderes no garantiza la desarticulación de las estructuras criminales, que tienden a regenerarse rápidamente.
El gobierno del presidente Daniel Noboa ha prometido continuar con las extradiciones y reforzar la cooperación internacional en materia de seguridad. En el último año, Ecuador ha vivido una escalada sin precedentes de violencia relacionada con el crimen organizado.
